- Mapa
- Artículos
- Introducción y Metodología
- Material y Métodos
- Mapa de Ubicación de los Puntos de Referencia
- El Clima del Piedemonte Madrileño
- Estudio de las Precipitaciones
- Frentes del SW
- Frentes del W
- Frentes del NW
- Otros Frentes
- Resumen de las Precipitaciones
- Evolución de las precipitaciones
- Mapa
- Datos
- Estudio de las Temperaturas
- Factores
- Mapa
- Datos
- Clasificación climática
- Climogramas Medios
- Episodio DANA, septiembre de 2023
- Datos de las estaciones meteorológicas
- Pozos de Nieve
- El Negocio de la Nieve
- Los Pozos del Abantos
- Decadencia de los Pozos de Nieve
Mapa
En el mapa se pueden ver los humedales del piedemonte de la Sierra de Guadarrama en su sector más occidental. Se pueden filtrar los datos por una clasificación de 25 grupos de lagunas y humedales. Pinchando en cada una de ellas se accede a información sobre su grupo, número, superficie y nombre si tienen.
Artículos
La serie del Piedemonte Madrileño se compone de 3 artículos.
Esta serie de artículos ha contribuido a la publicación del Libro Verde de El Escorial II, Geoparque Mundial, Patrimonio y Naturaleza. Para ampliar conocimientos sobre este tema, el libro se puede adquirir en el Ayuntamiento de El Escorial. Toda la información aquí presente, incluyendo los mapas y fotografías, es propiedad intelectual del autor de esta web.
Introducción y Metodología
Material y Métodos
Para este capítulo de climatología del piedemonte madrileño se ha utilizado la misma metodología aplicada al estudio del Clima del Sistema Central, la cual se explica en dicho artículo. Esta consiste básicamente en el análisis de cientos de estaciones meteorológicas, la homogeneización de sus series climáticas y la interpolación de los resultados a todo el área de estudio.
Los resultados se muestran en forma de mapas de temperatura y precipitación, y datos en forma de tablas o climogramas de los distintos puntos de referencia. Casi todos estos puntos coinciden con estaciones meteorológicas que existen o han existido en el pasado y cuyos datos se han homogeneizado para la serie climática de 1990-2019 (ambos incluidos). Sin embargo, algunos de ellos (Abantos, Almenara, Chapinería, El Estepar, Las Machotas, Puerto de La Paradilla, Puerto de Malagón y San Benito) corresponden a los datos de sus coordenadas obtenidos tras la elaboración de los mapas por extracción de variables.
Mapa de Ubicación de los Puntos de Referencia
A continuación, se muestra un mapa con la ubicación de los puntos de referencia donde se han obtenido las medias climáticas que se muestran posteriormente en forma de tablas. Los puntos se encuentran numerados del 1 al 27.
El Clima del Piedemonte Madrileño
El clima, que describe las condiciones meteorológicas a largo plazo, se define principalmente por la temperatura y la precipitación, junto con factores como el viento, la presión atmosférica o la humedad y la. Estas variables climáticas están intrínsecamente ligadas a factores geográficos como la latitud, altitud, orientación y proximidad al mar, lo que subraya la importancia de analizar detalladamente el relieve al estudiar el clima.
En el centro de la Península Ibérica, nuestra región se extiende entre el Océano Atlántico y el Mar Mediterráneo. La zona de estudio abarca la falda sureste de la Sierra de Guadarrama, conocida como Sierra de Malagón, que desciende hasta el Valle del Alberche (comienzo de la Sierra de Gredos), alcanzando su punto más alto en Cueva Valiente, a 1903 metros de altitud.
Zonificación
En nuestra área de estudio, la zonificación según el clima sería la siguiente:
- El Llano: situado por debajo de los 650-700 metros de altitud, en las cuencas del Cofio, Perales y Aulencia.
- La Rampa: ubicada entre los 650 y 850 metros de altitud, esta zona destaca por su inclinación, además de su orientación E-S-SO y sirve de transición entre el llano y el piedemonte.
- El Piedemonte: comprendido entre los 850 y 1000 metros de altitud, esta área constituye la base de las montañas. Es relativamente llana y recorrida por arroyos como La Moraleja, el Arroyo del Batán y el Arroyo Loco.
- Las Montañas: A partir de los 1000 metros de altitud, encontramos tres alineaciones principales: el cordal principal de la Sierra de Guadarrama, con cumbres como Cabeza Líjar (1823 m) o Abantos (1753 m); el cordal del Almenara, con montañas que apenas superan los 1200 m (Cerro de Las Umbrías, 1229 m, Almenara, 1259 m); y el cordal de Las Machotas (1461 m), un desgastado batolito granítico disociado del cordal principal de la sierra. Finalmente, la Sierra de Hoyo constituye un sector de montaña aislado que alcanza una elevación de 1403 m en la cima de El Estepar.

Clima general
Las distintas configuraciones geográficas presentes en nuestra área de estudio generan una diversidad de microclimas. En líneas generales, el clima predominante se clasifica como mediterráneo, caracterizado por veranos cálidos y secos, acompañados de una estación lluviosa que abarca desde el otoño hasta la primavera. Durante los meses estivales, se experimenta un período de sequía que varía en duración según la ubicación geográfica.
Durante esta fase de aridez, las precipitaciones en la región se limitan a eventos de tormentas. Es relevante destacar que, a diferencia de otras formaciones montañosas como los Pirineos o la Sierra de Albarracín, nuestra topografía no favorece el desarrollo significativo de estas tormentas, resultando en precipitaciones localizadas y de intensidad variable en la comarca.
Estudio de las Precipitaciones
Durante el periodo húmedo en la Península Ibérica, que abarca desde finales de septiembre hasta mediados de mayo, se producen diversos frentes atmosféricos, principalmente del suroeste, provenientes del Atlántico, con comportamientos particulares según su origen.
Frentes del SW
Los frentes del SW destacan por generar las precipitaciones más notables, siendo más comunes en los meses de octubre y noviembre, los más lluviosos del año.
Al ingresar desde el Atlántico, estos frentes cargados de humedad encuentran la barrera montañosa del Sistema Central, con elevaciones superiores a los 2000 metros en algunos puntos de Gredos y Guadarrama. Esta topografía provoca una retención de nubosidad y un aumento de la precipitación en la cara sur de la cordillera. Aunque las cifras no alcanzan las registradas en la cara sur de Gredos, el Guadarrama Occidental también experimenta cantidades significativas de precipitación, superando casi todos los años los 50-70 mm diarios.
Comportamiento en nuestra área de estudio
En nuestra área de estudio, la vertiente occidental del cordal del Almenara atrapa parte de la nubosidad entre el cerro de Santa Catalina (1386 m) y el San Benito, afectando a municipios como Robledo de Chavela y Valdemaqueda. Al este del Almenara, la nubosidad asciende hacia el norte hasta encontrarse con Las Machotas, generando lluvias intensas en Zarzalejo.
Hacia el norte y el este, las precipitaciones disminuyen gradualmente. La zona de El Escorial sigue siendo afectada por estas masas, que rodean Las Machotas. Las lluvias también son notables en la cuenca alta del Aulencia, donde los frentes quedan retenidos por las paredes del Abantos.
Frentes del W
Las masas frontales con dirección W llegan a nuestra región desgastadas tras atravesar la alineación montañosa de Gredos, cambiando luego la dirección en el Guadarrama a SO-NE. A pesar de ello, nuestra área de estudio es una excepción, cercana a la influencia de los vientos del W que permiten el paso de la nubosidad a través de los puertos de La Paradilla (1343 m) y Malagón (1536 m). Esto afecta aún con cierta intensidad el área de El Escorial, desapareciendo casi por completo en el piedemonte.

Frentes del NW
El Efecto Foehn
Los frentes del NW, más comunes en invierno, son masas de aire frío pero menos húmedas, originando precipitaciones menos notables. Chocan en las laderas segovianas de San Rafael, generando el conocido «Efecto Foehn». En esta ladera de barlovento, el aire húmedo descarga la mayor parte de la precipitación, ascendiendo y enfriándose al superar el cordal de la sierra. Al descender por la vertiente meridional, la ladera de sotavento, el aire más cálido carece de humedad.
Aunque en nuestra área de estudio estos frentes suelen dejar precipitaciones escasas y vientos fuertes, en zonas con influencia norteña, como el valle de La Jarosa o Cuelgamuros, pueden generar lluvias orográficas más moderadas.

Las Nevadas
Es relevante destacar que los frentes del NW desencadenan notables nevadas en las altitudes superiores de la Sierra de Malagón. A pesar de esto, estas nevadas tienden a no extenderse significativamente hacia el su. Solo con frentes más potentes se producen nevadas más sustanciales entre la cara sur del Abantos y la norte de Las Machotas, impactando áreas como El Escorial e incluso llegando a Zarzalejo.
Otros Frentes
Frentes del S
Aunque menos frecuentes, los frentes del S generan importantes precipitaciones en la vertiente meridional del Sistema Central, afectando de manera semejante a las Sierra de Gredos y Guadarrama.
Frentes del E y SE
Los frentes del SE, menos comunes, son responsables de notables nevadas en la submeseta sur y el piedemonte madrileño. Este fenómeno, como ocurrió con Filomena en enero de 2021, se debe a que las borrascas penetran tierra adentro sin obstáculos montañosos hasta alcanzar la cara sur de la Sierra de Guadarrama, donde liberan gran parte de la precipitación.
Resumen de las Precipitaciones
En nuestra área de estudio, las precipitaciones varían según la altitud, oscilando desde menos de 400 mm en el llano hasta más de 700-800 mm en la sierra, con picos superiores a 1000 mm en las cumbres más elevadas. La sequía se extiende por más de 4 meses en zonas bajas, 3 en zonas medias y se limita a 2 (julio y agosto) en las zonas altas.
Evolución de las precipitaciones
Un aspecto relevante en nuestra área, así como en toda la región mediterránea, es la disminución moderada de las precipitaciones debido al cambio climático. En la estación de AEMET en el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, las precipitaciones han descendido de más de 900 mm anuales (1946-1970) a menos de 750 mm en la serie actual (1990-2020), representando una disminución del 15%.
Esta pérdida de precipitación, en una región ya propensa a sequías, tiene impactos negativos en los aspectos medioambientales, económicos y agropecuarios. Las sequías más frecuentes afectan la estacionalidad del agua en lagunas y humedales, ecosistemas valiosos que albergan una rica biodiversidad.

Mapa
A continuación, se muestra un mapa de la precipitación anual en el área de estudio.
Datos
En la siguiente tabla se muestran algunas de las principales variables pluviométricas de los puntos de referencia mostrados en el primer mapa.

Estudio de las Temperaturas
Factores
En nuestra área de estudio, las temperaturas están mayormente influenciadas por la altitud, con una disminución aproximada de 0,6ºC por cada 100 metros de elevación. La orientación también desempeña un papel crucial, siendo las áreas umbrías más frescas que las solanas, especialmente notable en invierno.
La mayor parte de la región tiene orientación SE-S, mientras que la rampa destaca por su exposición solar más directa. Además, la inversión térmica afecta las temperaturas nocturnas, siendo común que las áreas bajas experimenten heladas invernales debido a este fenómeno.

En términos generales, las temperaturas medias anuales superan los 15ºC en el llano, rondan los 14-15ºC en la rampa, alcanzan los 12-13ºC en el piedemonte, y descienden por debajo de los 12ºC en la sierra. En las cumbres más elevadas, la temperatura media puede descender por debajo de los 8ºC.
Durante el invierno, las máximas en el piedemonte rondan los 8-10ºC, con heladas más comunes en situaciones de movimiento atmosférico. Las áreas propensas a la inversión térmica, como el valle del río Perales, registran temperaturas invernales que descienden casi todos los años por debajo de los -8ºC. Durante el verano, las máximas en el piedemonte se sitúan entre 30 y 32ºC, con mínimas de 15-17ºC. La inversión térmica tiene menos relevancia en esta temporada, y las noches tropicales son comunes en el llano, la rampa y el piedemonte debido a la baja humedad.

Mapa
A continuación, se muestra un mapa de la temperatura media anual en el área de estudio.
Datos
En la siguiente tabla se muestran algunas de las principales variables termométricas de los puntos de referencia mostrados en el primer mapa.

Clasificación climática
En nuestra región, la clasificación climática de Köppen identifica tres tipos de clima:
- BSk: Clima Estepario o Semiárido Frío
- Se extiende en la Península Ibérica debido al cambio climático.
- Caracterizado por temperaturas medias inferiores a 18ºC y precipitación en el rango de 200-400 mm.
- Exclusivamente presente en la zona de Chapinería.
- Csa: Clima Mediterráneo de Verano Cálido
- Predomina en la mayor parte de nuestra área, desde el llano hasta los 1100 m de altitud.
- Incluye un período de sequía estival con temperaturas medias que superan los 22ºC algún mes del año.
- Csb: Clima Mediterráneo Oceánico
- Similar al Csa pero con un verano más fresco, sin alcanzar los 22ºC de media.
- Se encuentra en las zonas más elevadas. En los pueblos, solo presente en Zarzalejo y las áreas altas de San Lorenzo de El Escorial.

Climogramas Medios
A continuación, se presentan seis climogramas que ilustran diferentes altitudes y características climáticas en nuestra área de estudio. Tres corresponden a pueblos a distintas altitudes, mientras que los otros tres representan las principales elevaciones montañosas: La Almenara (1259 m), Las Machotas (1461 m) y el Abantos (1753 m).
Episodio DANA, septiembre de 2023
Las Depresiones Aisladas en Niveles Altos (DANAS), también conocidas como «gotas frías», son eventos meteorológicos que afectan principalmente el este y sureste de España al final del verano y principios del otoño. Se manifiestan como bolsas de baja presión en la atmósfera alta, desplazándose hacia el mar Mediterráneo donde adquieren calor y humedad, desencadenando fuertes lluvias y vientos tormentosos.
Este fenómeno, con una circulación oeste-este, impacta la costa mediterránea sin penetrar profundamente en el interior peninsular. Su característica de lluvias intensas en cortos períodos provoca riesgos como riadas e inundaciones. Desde mediados del siglo XX, se ha observado un aumento en la frecuencia de estas DANAS en España, especialmente en Cataluña, la Comunidad Valenciana, la Región de Murcia y el este de Andalucía, tendencia atribuida al calentamiento global.
En septiembre de 2023, nuestra región experimentó su primer encuentro registrado con este fenómeno. Entre el 2 y el 4 de septiembre, algunas áreas del oeste de la Comunidad de Madrid experimentaron precipitaciones superiores a los 200 mm, estableciendo máximos históricos en estaciones meteorológicas como Fresnedillas y Zarzalejo. Estos eventos resaltaron la vulnerabilidad de nuestra área frente a fenómenos climáticos extremos.
Datos de las estaciones meteorológicas
En la estación de Fresnedillas, por ejemplo, el día 3 cayeron 187,4 mm, doblando el mayor registro histórico de 90,4 mm. En Zarzalejo, de la misma manera, cayeron hasta 202,6 mm, superando el récord anterior de 84,7 mm.
Estación meteorológica | Altitud (m) | Red | Día 2 | Día 3 | Día 4 | Total |
Madrid-Río Manzanares | 592 | Meteosierra | 27,4 | 43,5 | 33,7 | 104,6 |
Madrid-Retiro | 667 | AEMET | 14,9 | 36,1 | 55,8 | 106,8 |
Villanueva de la Cañada | 641 | AEMET | 31,7 | 104,9 | 17,1 | 153,7 |
Cebreros | 850 | AEMET | 9,2 | 96 | 1,4 | 106,6 |
Fresnedillas de la Oliva | 917 | Meteosierra | 27,2 | 187,4 | 17,8 | 232,4 |
Zarzalejo Estación | 1004 | Meteosierra | 31,3 | 195,7 | 12,5 | 239,5 |
Zarzalejo | 1117 | Meteosierra | 37,9 | 202,6 | 18,1 | 258,6 |
San Rafael | 1237 | AEMET | 14,8 | 147,8 | 26,2 | 188,8 |
Arboreto Luis Ceballos | 1317 | AEMET | 29,5 | 174 | – | – |
Robledondo | 1360 | Meteosierra | 29,2 | 235,4 | 35,2 | 299,8 |
Torrelodones | 879 | AEMET | 11 | 38,7 | 28 | 77,7 |
Alpedrete | 924 | AEMET | 13 | 51,8 | 30,2 | 95 |
La Pedriza | 962 | Meteosierra | 18,5 | 56,8 | 58,7 | 134 |
Puerto de Navacerrada | 1802 | Meteosierra | 15,5 | 82 | 34,1 | 131,6 |
Puerto de Navacerrada | 1894 | AEMET | 11,4 | 60 | 54,8 | 126,2 |
Pozos de Nieve
El Negocio de la Nieve
Aunque en el artículo de Glaciares de la Sierra de Guadarrama se habla más extensamente de los pozos de nieve, aquí se va a intentar especificar la importancia de estas estructuras en este sector de la Sierra de Guadarrama.
Entre los siglos XIV y XIX se dio una época conocida como la Pequeña Edad de Hielo (PEH). A lo largo de estos siglos, el clima se enfrío y los procesos glaciares se reactivaron en la Península Ibérica, con la formación de algunas masas de hielo que aún todavía sobreviven en lo más alto de los Pirineos.
Nuestras montañas, más modestas en altitud, permitieron también una mayor acumulación de la nieve hasta el punto de que el “negocio de la nieve” se convirtió en una actividad económica de relativa importancia durante los meses de verano. En esta época bajaban diariamente desde los ventisqueros carros cargados de nieve que descendían a las principales villas y ciudades, donde la nieve se vendía para ser utilizada en la conservación de alimentos, elaboración de refrescos e incluso como alivio para tratar algunas enfermedades.
Los Pozos del Abantos
En las laderas del Abantos, de apenas 1753 metros de altitud, la nieve no aguantaba tanto como en Cuerda Larga o los Montes Carpetanos. Por esta razón, en 1609 se mandaron construir unos pozos de nieve en lo más alto del Valle de Cuelgamuros, denominados como Pozos de Felipe II.
Estas estructuras consistían en una cavidad subterránea de grandes dimensiones con la misma forma que un pozo y donde se acumulaba la nieve caída durante la temporada. Esta se apretaba y tapaba con paja para conservarse mejor.
Gracias a una rehabilitación llevada a cabo en 1985, el mayor de los pozos, de 8,5 m de diámetro por 14 m de profundidad, se encuentra en muy buen estado y se puede visitar. En su interior se llegaban a acumular unas 230 toneladas de nieve.
Además de estos pozos, junto al Puerto de Malagón (1536 m) todavía se pueden observar los restos de un antiguo pozo de nieve, aunque este no debió de tener tanta relevancia como los de Cuelgamuros.
Al destino final se estima que llegaba un tercio de la carga inicial, al ir la nieve derritiéndose en el trayecto. Una vez descendida a las ciudades, la carga se guardaba en pozos de nieve de grandes dimensiones, desde donde se repartía por toda la ciudad.
En Madrid existían varios pozos de nieve en la actual Glorieta de Bilbao, conocida y nombrada antiguamente en los mapas como “Puerta de los Pozos de Nieve”. En el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial también había varias de estas estructuras. Uno de los pozos, el situado en la huerta de los religiosos junto al estanque, se encuentra todavía en perfecto estado.
Decadencia de los Pozos de Nieve
Estos pozos permanecieron activos unos 300 años hasta que a principios del siglo XX comenzaron a utilizarse otros métodos de enfriamiento, al mismo tiempo que los primeros efectos del cambio climático hicieron que la nieve comenzara a escasear en nuestras montañas.
