Mapa
En el mapa podemos ver la localización de los glaciares del macizo de La Serrota (2292 m) en su momento de máxima extensión durante la Edad de Hielo del Pleistoceno Superior. Se muestran los 5 glaciares formados en su cara norte y este.
Nota: la cartografía de los glaciares y su extensión es de elaboración propia de acuerdo con Hernández-Pacheco (1934) y Arenillas (1976), por lo que se trata de una aproximación a los resultados de sus estudios. Se pueden filtrar los glaciares cuaternarios del Sistema Central por sierras: Estrella, Béjar, Gredos (Sector Central), La Serrota, Guadarrama y Ayllón.
Artículos
Esta serie de Glaciarismo en la Península Ibérica se divide en 11 artículos:
- Glaciarismo en la Península Ibérica: Principales cordilleras
- Sistema Central: Sierra de la Estrella
- Sistema Central: Sierra de Béjar
- Sistema Central: Sierra de Gredos
- Sistema Central: La Serrota
- Sistema Central: Sierra de Guadarrama
- Sistema Central: Sierra de Ayllón
- Cordillera Cantábrica: Heleros de Picos de Europa
- Sierra Nevada: Glaciar Rocoso del Corral del Veleta
- Pirineos: Glaciares Pirenaicos I (del Vignemale a La Munia)
- Pirineos: Glaciares Pirenaicos II (del Néouvielle al Mont Valier)
Glaciarismo en La Serrota
Ubicación Geográfica
La Serrota es el macizo de mayor elevación de la alineación Villafranca-Serrota-Paramera, que recorre paralela a la Sierra de Gredos por su cara norte, separadas ambas por los valles del Tormes (oeste) y Alberche (este).
En este cordal destacan las siguientes cumbres, de oeste a este:
- Sierra de Villafranca: Coto Blanco o Pico Moros (2062 m)
- La Serrota: su pico homónimo (2292 m)
- Sierra de La Paramera: Pico Zapatero (2158 m)
Para comprender un poco mejor la orografía de estas sierras se va a ampliar sobre ellas.
La Sierra de Villafranca se inicia en las proximidades de El Barco de Ávila y finaliza en el Puerto de Chía (1665 m). Se trata de la parte más redondeada de la alineación motañosa, con cumbres en su parte central que superan los 1900 m (Tarayuela, 1964 m, Peña Negra, 1953 m, Zorreras, 1957 m, Coto Blanco, 2062 m). El Macizo de la Serrota se sitúa entre los puerto de Chía, Villatoro (1399 m) y Menga (1573 m). Finalmente, la Sierra de La Paramera se ubica entre los puertos de Menga por el oeste, y el Puerto de La Paramera (1416 m) y la Cuerda de los Polvisos por el este, en transición hacia la Sierra de Malagón.
De esta alineación montañosa, solo en el macizo de La Serrota se pueden observar huellas de modelado glaciar, mientras que en el resto de las zonas (sobre todo en el Pico Zapatero) solo se observan sistemas periglaciares.
Modelado Glaciar
Por este motivo, parece que el factor diferencial para la formación de glaciares en esta sierra durante la Edad de Hielo fue la altitud. De los 5 glaciares identificados en el macizo, cuatro tendrían su cuenca de alimentación en el tramo que une La Serrota (2292 m), el Cerro Calmocho (2265 m) y el Cerro del Santo (2199 m), siempre por encima de los 2100-2200 m.
Por tanto, podemos establecer que la altitud necesaria para la formación de glaciares en esta región geográfica fue de 2200 m.
La morfología glaciar en La Serrota se ha mencionado desde mediados del siglo XIX, pero no estudiado detalladamente hasta el siglo XX, con los trabajos de Hernández-Pacheco & Box (1934) y Arenillas & Martínez (1976).
Estos observaron un evidente modelado glaciar en los circos de la cara este y norte de la montaña, determinando que se trataría de pequeños glaciares asentados en circos favorables para la acumulación de nieve por el viento, dominante del oeste y suroeste. Por esta razón, el desarrollo fue mayor en la vertiente oriental, al igual que ocurre, a mayores proporciones, en la Sierra de la Estrella, la Sierra de Béjar o el Macizo del Peñalara.
Los glaciares se formaron durante el Último Máximo Glacial (LGM), el cual se asemejaría al estimado en la Sierra de Gredos, en torno al 27.000-24.000 BP, con un período de estabilización de varios miles de años. Seguramente desaparecieron al comienzo de la retirada de los hielos, hacia el 20.000-17.000 BP.
Durante el LGM, la línea de nieves perpetuas en Gredos se estima sobre los 1800-1900 m, altitud superada en todas las cabeceras de los glaciares de La Serrota.
Cara Norte
La cara norte contó con dos glaciares: el de los Hornillos, el más pequeño del macizo; y el de los Tejos, el más grande.
Glaciar de los Hornillos
Ubicado en la cara noreste del Cerro de Valdehierro (1988 m). Fue el glaciar formado a menor altitud, no llegando a superar su parte más elevada los 1900 m. Sin embargo, debido a su orientación (la más umbría de todos los circos), y su capacidad de acumular y conservar la nieve, fue capaz de desarrollarse a esta altitud.
El glaciar tenía su cuenca de alimentación en dos pequeños circos, en contacto entre ellos en el momento de máxima expansión del glaciar. Ambos confluían en la pequeña hoya del Hornillo Cimero, situada a unos 1680 m, estando la terminación del glaciar un poco más abajo, a 1580 m, donde encontramos unas marcadas morrenas lateral-frontales.
Glaciar de los Tejos
Glaciar situado en el amplio circo de la cara norte de la montaña, entre la propia Serrota y la Peña del Belesar (2145 m). La parte derecha del circo se encuentra menos erosionada que la izquierda, donde claramente se acumulaba más la nieve.
La parte más elevada del glaciar llegaba hasta los 2110 m y su lengua descendía hasta los 1800 m, deteniéndose en la zona del Prado de la Plata.
Cara Este
La cara este albergó los glaciares de la Media Luna, La Honda y Las Serradillas. Los dos más septentrionales, de la Media Luna y el de La Honda, probablemente estuvieron unidos durante el LGM.
Glaciar de la Media Luna
Ubicado en la cara este de La Serrota, junto a la Peña Alta (1928 m). Se desarrolló como glaciar de ladera, con poca capacidad de sobreexcavación. Por esta razón, su circo no está tan erosionado como el resto de los glaciares.
Su parte más elevada rozaba los 2160 m y su terminación alcanzaba los 1770 m. Tiene las morrenas bien marcadas, y en el momento de máxima expansión se encontraba en contacto con el glaciar de La Honda, situado en un circo contiguo.
Glaciar de La Honda
El glaciar de la Honda era el glaciar de mayores dimensiones de la cara este y tuvo un mayor poder erosivo. Su cuenca de alimentación superaba los 2200 m, llegando muy cerca del pico, y su frente descendió hasta los 1830 m. En un pequeño collado a unos 2050 m es donde se producía el traspaso de hielo con el glaciar de la Media Luna.
A su retirada dejó dos pequeñas cubetas, la más elevada a 2000 m y la más baja a 1830 m, correspondiendo con el momento de máxima expansión del glaciar. En esta última se puede identificar la formación de una pequeña laguna glaciar, hoy colmatada.
Glaciar de Las Serradillas
El glaciar de las Serradillas o las Cerradillas era el más meridional del macizo y único situado en la vertiente del Tajo, ya que el resto de los glaciares pertenecían a la del Duero. Tenía una orientación este-sureste, bastante favorable para la acumulación de la nieve.
Su circo se ubicaba en la cara sureste del Cerro del Santo (2199 m), con una cota máxima de 2150 m, y descendía hasta unos 1740-1750 m, aunque la principal morrena central está un poco más alta, a 1830 m.
También tiene unas marcadas morrenas laterales y, al igual que el glaciar de la Honda, formó una pequeña laguna glaciar en las primeras fases de retroceso (a 1910 m), ya colmatada con el tiempo.
Tabla
En la tabla se muestra una aproximación a las principales características de los glaciares de La Serrota durante el momento de máxima expansión de las masas de hielo.
Glaciar | Orientación | Altitud máxima (m) | Altitud mínima (m) |
---|---|---|---|
Los Hornillos | NNE | 1900 | 1580 |
Los Tejos | N-NNE | 2110 | 1790 |
Media Luna | E | 2160 | 1770 |
La Honda | E | 2240 | 1830 |
Las Serradillas | E-SSE | 2150 | 1730 |
CONTINÚA EN EL SIGUIENTE ARTÍCULO DE GLACIARISMO EN LA PENÍNSULA IBÉRICA
Referencias
- Hernández-Pacheco, F., & Box, C. V. (1934). El glaciarismo cuaternario de la Serrota (Ávila).
- Arenillas Parra, M., & Martínez de Pisón, E. (1976). La morfología glaciar de la Serrota (Ávila). Boletín de la Real Sociedad Geográfica, (112), 21-36.
- Úbeda Pintos, S. (2018). Las huellas glaciares de la Serrota (Ávila): un patrimonio natural débilmente reconocido.