El Curavacas (2524 m) es una de las montañas más emblemáticas de la Montaña Palentina y de toda la Cordillera Cantábrica. Es la segunda cima en altitud de Fuentes Carrionas, solo por detrás de Peña Prieta (2539 m). Para alcanzar su cima hay una vertiginosa y empinada canal que no entraña una gran dificultad en verano. Sin embargo, en condiciones invernales puede volverse muy peligrosa.
Este recorrido no sigue el itinerario habitual de subida al pico, sino que accede a través de la arista desde el Collado del Pando, para luego incorporarse a la vía normal en el Callejo Grande, hacer cumbre en el pico y continuar por la pista hasta el Portillo de Ves. Desde aquí, se desciende hasta el Refugio Piedrahita «campo a través», y luego se retorna hasta el pueblo de Vidrieros.
Se trata de una ruta muy dura físicamente, con unos 20 km totales y 1500 metros de desnivel por un terreno muy escarpado. No tiene una gran dificultad técnica, aunque hay algún paso aéreo tanto en la subida al Curavacas como entre este y la Aguja del Pastel. El tramo más comprometido está bien marcado con hitos.
Uno de los atractivos de esta ruta es que se pueden ver hasta 5 lagos glaciares del macizo, además de haber unas excelentes vistas del Valle de Pineda, Fuentes Carrionas y los Picos de Europa.
Vidrieros
Comenzamos en el pueblo de Vidrieros (1320 m). Existe un pequeño aparcamiento al final del pueblo donde se puede dejar el coche, e incluso dejan pernoctar en furgoneta y autocaravana. Al cruzar el pueblo, podemos aprovechar para cargar agua en una de sus fuentes, pues esta nos será muy escasa a lo largo de la ruta.
Vamos callejeando hasta llegar a la iglesia y continuamos por la pista haciendo zetas y ganando altura poco a poco.
Cartel informativo del Parque Natural de la Montaña Palentina
Iglesia de Vidrieros (1320 m). Aquí sale la pista por la que subiremos hasta la Cabaña de Mollorente
Parte final de la pista
Cabaña de Mollorente
Tras salvar un buen tramo de desnivel, la pista supera la línea del bosque y no saca al Chozo de Mollorente (1815 m). Al lado de la cabaña tenemos otra fuente con un pilón donde podemos recargar nuestras botellas. En este punto abandonamos la pista y continuamos por la vaguada hacia arriba en dirección al Collado de Pando.
Cabaña de Mollorente (1815 m)
Vistas hacia el Alto de las Lagunillas (2131 m) desde el Collado de Pando (2042 m)
Pico Pando
Desde el Collado de Pando (2042 m) tenemos vista de la cara norte del Alto de las Lagunillas (2131 m), además de toda la Sierra del Brezo y el Embalse de Camporredondo a nuestra espalda. Aquí ya habremos superado buena parte del desnivel de la ruta. Nos incorporamos a la arista cimera, donde continúa el camino bien señalizado con hitos. La primera cumbre del día es el Pico Pando (2221 m).
El camino se dirige al Pico Pando (izquierda). Ya asoma la impresionante pared del Curavacas
Pico Pando (2221 m)
Embalse de Camporredondo y Espigüete (2450 m)
El Hospital
Desde aquí, tenemos un pequeño descenso hasta un collado y una nueva subida hasta coronar el Hospital (2246 m). Desde este pico podremos ver las primeras lagunas glaciares: la Laguna del Pozo Oscuro y la Laguna de Hoyo Muerto.
En este punto, la arista es una loma bastante ancha, la cual nos permite descender con facilidad hasta el Collado del Hospital (2154 m). Aquí se puede descender hacia la cara norte, donde encontramos la famosa pared nordeste del pico, y afrontar la subida por la Pedrera Pindia. Nosotros, sin embargo, continuaremos hacia la canal sur del Curavacas, conectando con la vía normal de subida. En este tramo también encontramos algunos hitos, pero hay que estar atentos a las marcas y cruzar hacia la canal sin perder mucha altura.
Laguna del Pozo Oscuro
Laguna de Hoyo Muerto
Desde El Hospital (2246 m) comenzamos un ligero descenso
Callejo Grande
Vistas hacia la Sierra del Brezo. Se distinguen los pueblos de La Lastra, Triollo y Vidrieros
Vista hacia abajo. Esta canal es la ruta normal de subida desde Vidrieros
Curavacas
Una vez nos encontremos en el Callejo Grande, el sendero coge mucha inclinación. Esta parte hay que afrontarla con calma, pues es la más dura de la ruta. El camino va zigzageando aprovechando toda la anchura de la canal. Después de este tramo, que parece interminable, alcanzamos la Portilla del Callejo, ya muy cerca del pico. Desde aquí, alcanzamos la cumbre del Curavacas (2524 m) ascendiendo los metros finales por su «espalda».
Las vistas desde el pico son inmejorables, se distingue desde la Sierra de Híjar al este a la Montaña Central Leonesa al oeste. Los Picos de Europa al norte y toda la planicie castellana al sur. Las montañas más destacables que se ven en la proximidad son el Espigüete (2450 m) y Peña Prieta (2539 m).
Curavacas (2524 m)
Detalle de la senda hacia donde nos dirigimos
Espigüete (2450 m). Por ese cortado es por donde continúa nuestra ruta
Vistas del Pozo Curavacas y Picos de Europa al fondo. Apenas quedan algunos pequeños neveros en las partes más altas de la cara norte
Aguja del Pastel
Tras unos minutos en la cima continuamos nuestro camino por la arista. En primer lugar, volvemos sobre nuestros pasos durante unos metros hasta dar con unos hitos que bajan en dirección opuesta hacia un cortado. En esta zona se distingue fácilmente el camino, bastante bien pisado. Una vez llegamos al Portillo (2447 m), debemos estar bien atentos a los hitos, ya que es una zona algo comprometida y es fácil no coger el camino correcto. El sendero continúa por la cara sur del pico, única forma de salvar la gran pared que bloquea nuestro camino. Aunque es un paso algo aéreo, no entraña ninguna dificultad técnica.
Como hacia la mitad de la cara sur, damos con una pequeña canal por donde coronamos la Aguja del Pastel (2502 m). Todavía estamos muy cerca del Curavacas, por lo que podemos ver todo el circo glaciar de su cara norte, así como el Pozo Curavacas asomándose frente al Valle de Pineda.
Dejamos atrás el Curavacas
Todavía nos queda por ascender un último pico
Este es el tramo más difícil de seguir, debemos estar atentos a los hitos que rodean la pared por la cara sur
Aguja del Pastel (2502 m)
Pozo Curavacas, Cabecera del Valle de Pineda y Picos de Europa
Alto de Curruquilla
Comenzamos de nuevo otro descenso algo técnico, pero bien indicado con hitos, los cuales nos van llevando por el mejor camino posible. Alcanzamos un collado cerca del Pico Oeste (2343 m), y desde aquí el camino vuelve a dirigirse hacia la vertiente sur de la montaña. Nosotros lo abandonamos para subir a la última cumbre del día, el Alto de Curruquilla (2417). Esta cima ya es bastante plana, pero sigue ofreciendo muy buenas vistas de los alrededores.
Vista atrás
Alto de Curruquilla (2417 m)
Comenzamos la última ascensión
Espigüete (2450 m)
Portillo del Ves
Comenzamos un suave descenso, que se va haciendo cada vez más empinado hasta el Portillo del Ves (2218 m). Aquí nos despedimos de la arista con la vista de los últimos lagos glaciares de la ruta, los Pozos del Ves.
Embalse de Camporredondo
Fuentes Carrionas desde Peña Prieta (2539 m)
Pozos del Ves
Portillo del Ves (2218 m)
Refugio Piedrahita
En este punto abandonamos cualquier sendero marcado y continuamos «campo a través», siguiendo el mejor itinerario posible. En primer lugar, trazamos una diagonal de descenso hacia la zona de las Fuentes de Roblo, y desde aquí descendemos por la loma abajo hasta alcanzar el Refugio Piedrahita (1740 m). Este tramo es el más lento y también el más pesado, ya que no hay ningún sendero claro. La parte de arriba del descenso es muy rocosa y escarpada, mientras que el tramo de abajo tiene matorral muy denso que dificulta el avance. Junto al refugio encontramos una fuente con pilón para el ganado.
Comenzamos la bajada en diagonal hacia la loma
Última parte de la bajada
Continuamos bajando en dirección al refugio. Todo este tramo no está señalizado ni marcado con hitos
Llegamos al Refugio y la Fuente Piedrahita (1740 m)
Vuelta
A partir de aquí, ya solo nos queda retornar hasta el pueblo por la pista, paralelos en todo momento al Arroyo de las Puertas. Es un descenso largo, pero muy tranquilo y donde encontramos otra fuente, más fría y caudalosa que la de Piedrahita.
Ya solo nos queda retornar por la pista hasta el pueblo
Comienza a asomar de nuevo el pico
Última vista de la cara sur del Curavacas
Video
https://www.youtube.com/watch?v=a_YPD9ueRj8
Datos de Interés
Vegetación: La ruta recorre desde fusiones arbóreas hasta zonas alpinas. En cotas bajas predominan robledales y hayedos del Parque Natural Montaña Palentina, mientras que en zonas altas dominan matorrales de brezo, arándano y pastizales alpinos con especies como sempervivum y tormentilla.
Fauna: El entorno alberga mamíferos emblemáticos como oso pardo, lobo, ciervo y corzo, así como rebeco en zonas rocosas. Entre las aves destacan el águila real, buitre leonado, urogallo, alimoche y otros carroñeros.
Medioambiental: La ruta discurre dentro del Parque Natural Fuentes Carrionas y Montaña Palentina, espacio protegido desde 2000. Forma parte de la Red Natura 2000, además se ubica en un territorio declarado Reserva Nacional de Caza y rodeado de LIC y ZEPAs por su importancia biológica.
Paisajístico: Ofrece panorámicas espectaculares de macizos calcáreos y conglomeráticos como Espigüete (2450 m), circos y lagunas glaciares (Pozo Curavacas), valles boscosos y embalses. Además, destaca el valor geológico kárstico de la Cordillera Cantábrica y elementos etnográficos como pastorales tradicionales en los valles.