Ficha técnica
Nombre Común | Arce Campestre |
– División | Angiospermas |
– Orden | Sapindales |
– Familia | Sapindaceae |
– Género | Acer |
– Especie | Acer campestre |
– Altura | Hasta 15 m |
– Estado de conservación | Preocupación Menor (LC) |
Descripción
El Acer campestre, conocido comúnmente como arce campestre, es una especie que, aunque puede alcanzar hasta 15 metros de altura, habitualmente se presenta como un árbol pequeño o arbusto de escasos metros, con una copa redondeada. La corteza de este árbol es de un color pardo-grisáceo, bastante lisa en los ejemplares jóvenes, pero se va agrietando y oscureciendo a medida que el árbol envejece. En los individuos de mayor tamaño, la corteza tiende a volverse negruzca. Las ramas más jóvenes, o ramillas, no son viscosas y presentan un color que varía del pardo al pardo-rojizo. Las yemas de las ramas, que son pelosas en el ápice, son más estrechas que las cicatrices foliares, y la yema terminal tiene forma ovoide, con tres a cinco pares de escamas provistas de cilios blanquecinos.

Características
Las hojas del Acer campestre son pecioladas, pudiendo alcanzar hasta 10 cm de largo. Son glabras, aunque pueden presentar algunos pelos en las axilas de los nervios en el envés, además de pequeños cilios en el margen. El color de las hojas es verde oscuro por el haz y más claro por el envés, tornándose amarillentas al llegar el otoño. El limbo tiene una forma palmeada, con cinco lóbulos bien definidos; los dos lóbulos basales son menos prominentes, mientras que el lóbulo central es más ancho en la parte superior y se estrecha hacia el ápice, donde se presentan pequeños lóbulos. Esta morfología hace que las hojas sean fácilmente identificables.
Hojas
Las hojas del Acer campestre se caracterizan por tener una estructura peculiar, con los lóbulos más destacados en la parte superior. Este diseño palmeado contribuye a la distinción de la especie entre otros tipos de arces. Como se mencionó previamente, su color verde oscuro por el haz se suaviza al volverse más claro en el envés, donde también se pueden observar los pelos mencionados. Durante el otoño, las hojas tienden a volverse amarillas, lo que le otorga un cambio estacional llamativo, que resalta en los paisajes donde se encuentra este árbol.
Flores
Las flores del Acer campestre son unisexuales o hermafroditas, de un color amarillo-verdoso, y se agrupan en racimos laxos que suelen ser erectos. Estas flores aparecen simultáneamente con las hojas, lo que crea un contraste visual interesante en la primavera. La floración no es exuberante, pero es significativa durante la temporada. Al ser una especie de arce, las flores también tienen un tipo de polinización que favorece la dispersión de su genética por medio del viento, lo que es común en muchas especies de árboles del género Acer.
Fruto y semilla
El fruto del Acer campestre es una disámara que puede alcanzar los 3-5 cm de longitud. Estas semillas tienen un diseño característico, con alas muy divergentes, lo que permite que se diseminen de manera eficaz por el viento. Las disámaras suelen estar dispuestas en grupos, y cuando maduran en otoño, sus alas permiten que se desplacen a distancias considerablemente largas para facilitar la reproducción de la especie.

Hábitat
El Acer campestre prefiere crecer en suelos calizos y frescos, encontrándose habitualmente en zonas soleadas. Este árbol es resistente a diversas condiciones y se adapta bien a diferentes tipos de bosques, aunque suele preferir aquellos que no son demasiado sombreados. En sus primeras etapas de crecimiento, el Acer campestre muestra una notable tolerancia a la sombra, pero, a medida que se desarrolla y alcanza su etapa reproductiva, requiere más luz para producir semillas. Este comportamiento ecológico lo convierte en una especie intermedia en la sucesión ecológica de áreas alteradas, ya que no es una de las primeras especies en colonizar nuevas áreas, pero sí se encuentra entre las que se establecen después de la perturbación.

Distribución
El Acer campestre tiene una distribución bastante amplia en Europa, especialmente en la mitad septentrional del continente, donde se encuentra de forma natural en zonas de montaña. En España, la especie está presente sobre todo en las regiones más altas del norte, mientras que en Portugal, el Acer campestre se encuentra naturalizado. La especie también se extiende hacia Asia Menor, y es común en países como Turquía y el Cáucaso. Su presencia en el norte de África es bastante esporádica, limitándose principalmente a áreas específicas como las montañas del Atlas, en Argelia.
Aunque su distribución original podría haberse visto afectada por la plantación y la introducción en otras áreas, el Acer campestre sigue siendo una especie común y apreciada en muchas partes de Europa. En algunas regiones, como en Inglaterra, donde se le conoce también como el «arce campestre», es el único arce nativo, lo que resalta su importancia ecológica dentro de esos ecosistemas.

Resto de Artículos
Consulta el resto de Artículos de Flora: Gimnospermas y Angiospermas.